Nuestra organización cuenta con sede propia
Se podrán llevar adelante las reuniones del Comité entre otras tareas
Se trata de una oficina ubicada en la calle Uruguay 560 entre Lavalle y Tucumán, justo frente al Palacio de Justicia, que tiene comodidades para permitir el funcionamiento de la Asociación, de nuestro Comité –en sus reuniones habituales-y asimismo concentrar la tarea que como Uds. bien saben estaba un poco desperdigada más allá del apoyo que siempre nos brindó la Fundación que dirige el Dr. Arazi donde hasta ahora tuvo asiento nuestra sede de modo formal, ya que hace un tiempo estamos haciendo las reuniones del Comité en la sede de la Asociación de Magistrados de la Capital Federal, que también nos brindó su apoyo.
La oportunidad que surgió significó un desembolso para nuestra Asociación de sesenta mil dólares (U$s 60.000.-). Gran parte de ese dinero fue colectado durante este último tiempo merced a los resultados de los congresos, jornadas y seminarios que organizamos y nos permitieron tener invertidos los fondos en el banco, aunque con un rédito que desde luego no superaba los índices inflacionarios.
Esta fue una de las razones por la cual decidimos su inversión en el inmueble cuyas fotos acompañamos al pie de esta nota para que Uds. tomen conocimiento de las comodidades que ofrece el lugar.
Se trata de una oficina de tres ambientes, con dos baños, con aire acondicionado, con pintura impecable y pisos de parquet plastificado que nos permiten pensar solo en instalarnos en el lugar y comenzar a funcionar desde allí pues hasta cuenta con una central telefónica a la que desde luego deberemos conseguir una línea.
Como los fondos con los que contábamos no alcanzaban a cubrir la totalidad del precio pese a que orillamos los cincuenta mil dólares y tal vez un poquito más según el resultado que arroje la transformación de un fondo común de inversión al tiempo que debamos escriturar, nos pusimos en contacto con los socios fundadores, con los ex presidentes y con algunos socios benefactores, y entre todos ellos entusiasmados con la idea, más el aporte de los miembros del actual Comité Ejecutivo y otros socios que con gusto brindaron su apoyo económico a la iniciativa, logramos –por lo menos por ahora- contar con los fondos necesarios para la compra.
Queremos destacar como nota saliente que además del apoyo de los mencionados socios, los jóvenes procesalistas también en un gran número brindaron su apoyo a esta iniciativa, y desde luego pueden sentir el orgullo también ellos de haber contribuido a que la Asociación tenga su casa propia.